Siempre queda espacio para una sonrisa
Entre este todo batiburrillo siempre hay quien te ayuda a sonreir un poco, alguien que siempre te da una mano, alguien que siempre está dispuesta a ayudar, aunque solo sea escuchando, aunque le robes algo de tiempo, siempre hay alguien ahí.
Por supuesto me refiero a alguien en especial, alguien que me ha oido, me ha aconsejado, alguien que en ese momento estaba allí.
Son las tantas de la madrugada, y pese a no haber tomado café en un par de dias no tengo sueño, eso si, la siesta no me la ha quitado nadie, uno tiene su aguante, y sabe donde están los límites.
Tres consejos, imparciales, me sirven para darme cuenta de que esa persona es muy especial para mi, nunca me atreveré a decirselo, no se ni tan siquiera si me atreveré a decirle que me muero de ganas por conocerlo.
El me está enseñando a pocos a ser positivo, aun siendo yo una persona tremendamente positiva, a olvidar los malos momentos, cosa que por naturaleza tiendo a hacer. Y es normal siendo el una persona tan positiva, o por lo menos su aura eso es lo que refleja.
Y yo que soy tan poquita cosa, que tengo la cabeza tan confundida, que ni teniendolo todo claro consigo ver con claridad.
No busco ni dar pena, ni lastima, solo cuento cosas que siento, siento otras mas cosas que no he comentado nunca aquí, cosas que con el tiempo me veré lo suficientemente inspirado como para contarlas.
¿Y a partir de ahora que? Siempre veo al futuro con optimismo, y el presente con muchos miedos, el optimismo es el que te da fuerza y alas para seguir y te llena de propositos firmes que con el tiempo acaban haciendose realidades. El presente me da miedo, inseguridad, panico, ganas de que pase cuanto antes, y aunque sea, llegue el futuro mas inminente, el primer atisbo serio de felicidad. El pasado te da palos, alegrias y te serena, te hace analizar las cosas, te marca las pautas de lo que será tu futuro, y te atrapa enmarañandote en el presente.
Tu compañero, mi querido lector, eres lo mejor que me ha pasado en tiempo, no vienes a suplir a nadie, no vienes a ocupar el espacio que antaño ocupaba nadie, tienes ya tu espacio propio en mi corazón, y este no tiene limites a la hora de expandirse, como decian algunas teorías acerca del universo, es algo más que corazón. Tambien es cabeza.
No se porque, pero te admiro.
Por supuesto me refiero a alguien en especial, alguien que me ha oido, me ha aconsejado, alguien que en ese momento estaba allí.
Son las tantas de la madrugada, y pese a no haber tomado café en un par de dias no tengo sueño, eso si, la siesta no me la ha quitado nadie, uno tiene su aguante, y sabe donde están los límites.
Tres consejos, imparciales, me sirven para darme cuenta de que esa persona es muy especial para mi, nunca me atreveré a decirselo, no se ni tan siquiera si me atreveré a decirle que me muero de ganas por conocerlo.
El me está enseñando a pocos a ser positivo, aun siendo yo una persona tremendamente positiva, a olvidar los malos momentos, cosa que por naturaleza tiendo a hacer. Y es normal siendo el una persona tan positiva, o por lo menos su aura eso es lo que refleja.
Y yo que soy tan poquita cosa, que tengo la cabeza tan confundida, que ni teniendolo todo claro consigo ver con claridad.
No busco ni dar pena, ni lastima, solo cuento cosas que siento, siento otras mas cosas que no he comentado nunca aquí, cosas que con el tiempo me veré lo suficientemente inspirado como para contarlas.
¿Y a partir de ahora que? Siempre veo al futuro con optimismo, y el presente con muchos miedos, el optimismo es el que te da fuerza y alas para seguir y te llena de propositos firmes que con el tiempo acaban haciendose realidades. El presente me da miedo, inseguridad, panico, ganas de que pase cuanto antes, y aunque sea, llegue el futuro mas inminente, el primer atisbo serio de felicidad. El pasado te da palos, alegrias y te serena, te hace analizar las cosas, te marca las pautas de lo que será tu futuro, y te atrapa enmarañandote en el presente.
Tu compañero, mi querido lector, eres lo mejor que me ha pasado en tiempo, no vienes a suplir a nadie, no vienes a ocupar el espacio que antaño ocupaba nadie, tienes ya tu espacio propio en mi corazón, y este no tiene limites a la hora de expandirse, como decian algunas teorías acerca del universo, es algo más que corazón. Tambien es cabeza.
No se porque, pero te admiro.
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